Mosquero de cerdas de 30 borlas en cerda alazana y borlas cosidas con hilo rojo consiguiendo un trabajo muy personal.
Las agujetas del mosquero para su posterior colocación en la cabezada vaquera esbozan unas espiral que derivan en la formación del mosquero, intentado hacer un símil con nuestro logo.
1.- Cogemos la cola (a) y le sacamos dos cabos. Uno en la punta del hueso (b) y otro en el tercio superior del mismo (c). Hay gente que humedece el pelo, pero no es realmente necesario. 2.- Enrollamos el cabo (a) hacia arriba alrededor del hueso y apretando fuertemente. Siempre hacia arriba. 3.- Al llegar a la zona donde está el cabo (c), empalmamos al (a) con el (c) enrollando ambos juntos y bien apretaditos. Seguiremos enrollando ambos, ya juntos, hacia arriba hasta dejar un sobrante suficiente para hacer el "caracolito". 4.- Cogemos el cabo (b) y lo enrollamos alrededor del hueso en dirección contraria hasta llegar a donde están los otros dos cabos enrollados. Esta operación, si se hace bien y se aprieta bien, pondrá nuestro nudo elevando la punta del maslo hacia arriba. 5.- Empalmamos el cabo que formaban el (a) y el (c) juntos con el (b) cruzándolos varias veces, hasta que formen un cabo único perpendicular al hueso. Este cabo pequeño se enrollará sobre sí mismo hasta formar una pequeña bolita o "caracolito" que, con ayuda de un limpiacascos, pasaremos por debajo de la última vuelta que dió el cabo (b) antes de unirse a los otros dos. Esa vuelta lo sujetará. El sobrante del caracolito lo dejaremos pasar sin pasar por la vuelta y se dividirá en dos partes iguales que se abrirán para que se formen los bigotes a ambos lados del nudo.
Mosquero
de seda elaborado totalmente en rojo, imprimiendo al caballo fuerza y mucha personalidad. Un color que combina perfectamente tanto con las capas de colores fríos, como caballos tordos y negros, como con las cálidas, siendo el castaño el mejor ejemplo; aunque con el que consigue la combinación más armoniosa es con el caballo de capa blanca.
Peinetas con aires vaqueros, elaborada con seda, cuero e hilo, con reminiscencias a los penachos de nuestros mosqueros de seda. Tres flores como tres soles por la parte delantera, que en este caso nos recuerda a la buganvilla por los colores utilizados, y piel de ternera cosida con hilo por la parte trasera.
Nuestro pequeño homenaje al mosquero de seda: de un penacho, una peineta.
Mosquero de seda en tonos beige y camel, para un jinete clásico y elegante, para colocar en al cabezada de su caballo y mantener un juego con su vestimenta.
Veníamos pensando desde hace bastante tiempo en un logotipo para nuestra humilde y familiar empresa, pero entre unas cosas y otras, nunca habíamos encontrado un hueco para poder desarrollarlo medio en condiciones. Queríamos que fuese algo muy sencillo, de un solo trazo y que nos identificara.
El esbozo de una pequeña borla con aires aureos es la imagen elegida para identificar nuestros trabajos. A partir de ahora, nuestros mosqueros estarán identificados. ¿quieres uno en tu casa?